El trabajo de limpieza y desengrase de las extracciones de una cocina industrial es fundamental para garantizar la seguridad, higiene y eficiencia del sistema de ventilación. Las campanas y conductos de extracción acumulan grasa, hollín y otros residuos con el tiempo, lo que puede causar malos olores, afectar la calidad del aire y aumentar el riesgo de incendios. Este proceso suele incluir la limpieza profunda de la campana extractora, los filtros, los conductos de ventilación y los ventiladores.
Preparación del área de trabajo
- Apagado de equipos: Se apagan los sistemas de extracción y, si es necesario, las zonas de cocción cercanas para evitar riesgos.
- Protección del entorno: Se protegen las superficies cercanas, como estufas, freidoras o encimeras, con plásticos o lonas para evitar que los productos de limpieza y desengrasantes dañen el mobiliario o el equipo.
Limpieza de la campana extractora
- Retiro de filtros: Los filtros de grasa de la campana extractora son retirados para su limpieza individual.
- Limpieza interna y externa de la campana: Se aplican productos desengrasantes específicos en la parte interna y externa de la campana para disolver los residuos de grasa acumulada. Se deja actuar el desengrasante el tiempo recomendado por el fabricante y luego se limpia con cepillos, esponjas o paños.
- Enjuague: Se enjuaga con agua limpia para retirar los residuos de grasa y el producto limpiador, asegurándose de que no queden restos de detergente en las superficies.
Limpieza de los filtros (opcional)
- Desengrasado de los filtros: Los filtros, que acumulan una gran cantidad de grasa, son sumergidos en una solución desengrasante o limpiador industrial adecuado. Estos productos disuelven las grasas incrustadas, facilitando su posterior limpieza.
- Cepillado o lavado a presión: Después de remojar, los filtros se limpian con cepillos o mediante ultrasonidos en nuestras instalaciones para eliminar cualquier resto de grasa. Posteriormente, se enjuagan bien con agua caliente y se dejan secar antes de reinstalarlos.
Limpieza de los conductos de extracción
- Acceso a los conductos: En muchos casos, se necesitan aberturas de acceso específicas en los conductos para facilitar su limpieza. Si estas aberturas no están presentes, se pueden crear siguiendo las normativas para facilitar el acceso a los tramos más largos y recónditos.
- Desengrasado de los conductos: Se utilizan productos desengrasantes aplicados mediante generadores de espuma desengrasante, cepillos o equipos especializados de limpieza de conductos. Se emplean máquinas que introducen cepillos giratorios dentro de los conductos, combinados con sistemas de extracción de grasa, para garantizar una limpieza profunda.
- Aspirado y eliminación de residuos: Durante y después de la limpieza, los residuos de grasa y suciedad desprendidos son aspirados mediante equipos industriales, evitando que se dispersen en la cocina o vuelvan a acumularse en el sistema.
Limpieza del ventilador o motor de extracción
- Desmontaje del ventilador (si es necesario): En algunos sistemas de extracción, el ventilador o motor debe ser desmontado para limpiarlo adecuadamente. El ventilador es una parte crítica del sistema, ya que empuja el aire y la grasa hacia los conductos.
- Limpieza y desengrase: Se utiliza un desengrasante para eliminar la grasa acumulada en las aspas del ventilador. A veces, la acumulación de grasa en el ventilador puede reducir la eficiencia del sistema de extracción.
Prueba del sistema
- Prueba del sistema de extracción: Se enciende el sistema de extracción para verificar que todo funciona correctamente. Se revisa que la campana no genere ruidos inusuales y que la succión del aire sea la adecuada.
Recomendaciones
- Recomendaciones de mantenimiento: Se proporcionan sugerencias para mantener el sistema limpio por más tiempo, indicando la frecuencia recomendada para futuras limpiezas, en función de la actividad y uso de la cocina.
Mantenimiento periódico
- Se recomienda realizar la limpieza y desengrase de las extracciones de cocina industrial de forma regular, dependiendo del volumen de trabajo de la cocina. En cocinas de alto uso, como restaurantes o comedores industriales, la limpieza puede ser necesaria con mayor frecuencia.
Este trabajo es esencial para evitar la acumulación excesiva de grasa, que no solo puede comprometer el rendimiento del sistema de extracción, sino también aumentar el riesgo de incendios en la cocina.
